Influencia de la meteorología en la guerra civil española: la batalla de Teruel (parte I)

Abstract

Tras la victoria a finales de octubre de los sublevados en el frente del norte la guerra se inclinaba cada vez más hacia su bando. Los aliados de Franco, la Alemania nazi y la Italia fascista, querían realizar una ofensiva final sobre la capital para hacer caer definitivamente a la República. Se preparó una gran concentración de tropas en la zona de Zaragoza y Soria con intención de atacar Guadalajara y luego caer sobre Madrid, una repetición del plan italiano que había fracasado en marzo del 37. Pero esta situación no pasó desapercibida para el servicio de inteligencia republicano y el Estado Mayor Central decidió emprender una acción ofensiva-defensiva para robar la iniciativa a los franquistas y distraer tropas de esta posible ofensiva. Teruel fue la ciudad elegida, se encontraba en un saliente del frente de Aragón, que apuntaba peligrosamente hacia el Mediterráneo, era una capital de provincia, de pequeña población, con poco interés militar y escasamente defendida. Su conquista no estaba destinada a ser principio de nada, sino una importante acción de propaganda para distraer a los franquistas, ganar tiempo prolongando la guerra y aumentar la moral propia.